El cambio climático, el aumento de la temperatura, la sequía, la pérdida de biodiversidad son problemas ambientales que captan con mayor frecuencia nuestra atención, convirtiéndolos en una de nuestras preocupaciones. La encuesta del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) del mes de marzo, que interpelaba de manera directa sobre el cambio climático, revela que el 30,4% de las personas consultas afirma que este aspecto le preocupa mucho y a otro 42,2% bastante.
Asimismo, el 56,4% de las personas encuestadas considera que la acción de los seres humanos (la industria, los coches, los gases, la construcción, el consumo, etc.) está influyendo mucho en el cambio climático y el 30,2% afirma que bastante frente al 8,5% que asevera que influye poco y un 2,4% que considera que no influye nada.
Por lo que se refiere a poder dar marcha atrás al cambio climático, el mayor porcentaje de las personas encuestada (60,7%) considera que el cambio climático se puede detener para que la situación no se agrave, mientras que el 17,5% considera que la situación es irreversible y el 14,8% que es posible dar marcha atrás al cambio climático.
Ante esta notable preocupación ambiental, surge una oportunidad para modificar el vínculo actual con nuestro medio ambiente y establecer una relación respetuosa con nuestro entorno. Para conseguirlo la educación ambiental favorece el desarrollo de habilidades prácticas y pensamiento crítico de la ciudadanía, en lo colectivo y en lo individual, para poder participar, atendiendo a su capacidad, de las soluciones orientadas a minimizar su impacto ambiental.
Se trata de canalizar esta conciencia ambiental hacia prácticas más sostenibles, promoviendo cambios de comportamiento y fomentando la participación ciudadana. Al facilitar la comprensión de la problemática y los retos ambientales, la ciudadanía incorpora criterios ambientales en su toma decisiones y participa de un modelo social más sostenible. La educación ambiental es clave en este reto y en Imedes apostamos y creemos en su poder transformador.
